En un doloroso recordatorio de la violencia que aún enfrenta la comunidad LGBT+, Valentina Sodi, reconocida activista y administradora del bar «Alebrijes» en la colonia Rubén Jaramillo, Morelos, fue víctima de un crimen brutal el pasado mes de junio. El trágico incidente tuvo lugar el mismo día en que se celebraba el Día Mundial de la Diversidad Sexual.
Según los informes de la Fiscalía de Morelos, dos individuos a bordo de una motocicleta ingresaron al establecimiento y dispararon contra Sodi, quien fue rápidamente trasladada al Hospital General de Cuernavaca «Dr. José G. Parres». A pesar de los esfuerzos médicos, lamentablemente falleció debido a las heridas sufridas.
El móvil del crimen apunta hacia el cobro de piso, una práctica delictiva que ha cobrado relevancia en la región. Las autoridades locales han iniciado una investigación exhaustiva, revisando videos de cámaras de seguridad privadas y públicas para identificar a los responsables y esclarecer los hechos.
El gobierno de Morelos y el municipio de Temixco han condenado enérgicamente el ataque, manifestando su solidaridad con los familiares de la víctima y comprometiéndose a colaborar con las autoridades para asegurar que los culpables sean llevados ante la justicia.
La comunidad LGBT+ y diversos colectivos han expresado su indignación y preocupación ante este acto de violencia, subrayando la necesidad de combatir la discriminación y la violencia de género que aún persisten en la sociedad mexicana.
Este trágico suceso no solo ha conmocionado a la comunidad local, sino que también sirve como un llamado urgente a la acción para proteger los derechos y la seguridad de todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.
El asesinato de Valentina Sodi no solo es una pérdida para sus seres queridos y para la lucha por los derechos LGBT+, sino que también refleja los desafíos continuos que enfrenta la sociedad mexicana en su camino hacia la igualdad y la justicia para todos.
